NOTICIAS - Acciones Misioneras y Pastorales
22 de Noviembre de 2017
Misiones salesianas: desde 1875 sin fronteras para ayudar
1875, Primera Expedición Misionera Salesiana. 1877, primera misión de las Hijas de María Auxiliadora. Ambas en noviembre, haciendo realidad el sueño de Don Bosco.
Don Bosco, entre sus sueños famosos, tuvo uno que desde esta parte del mundo siempre se recuerda. Él soñó con la Patagonia y sus habitantes. Pero ese sueño, de repente, se escapó de él y se hizo libre. Y así, se hizo realidad. En noviembre se vive el aniversario de las dos primeras misiones salesianas.
11 de noviembre de 1875
En esa fecha se produjo un viaje de ida que ya no tiene vuelta. Fue la Primera Expedición Misionera Salesiana. Diez misioneros dejaron de lado la comodidad de sus hogares y recibieron la despedida en la iglesia María Auxiliadora de Valdocco (Italia): partieron rumbo a la Patagonia argentina, esa misma que se dibujó en el sueño del joven Don Bosco.
14 de noviembre de 1877
Dos años después, en el mismo mes, las FMA, Hijas de María Auxiliadora, también llevaron de viaje su corazón en busca de los más necesitados. Desde el puerto de Génova seis muchachas de entre 17 y 25 años llegaron hasta América para brindar educación, amor y evangelización, desde el carisma de Don Bosco y con la protección de la Auxiliadora.
Uno más uno dio… miles
Esos dos viajes fueron la semilla que germinó en misiones a lo largo y ancho del mundo, allí donde jóvenes con necesidades se hacen carne. Misión a misión, este año se vivió la 148° Expedición Misionera Salesiana y ya hay más de 11.000 salesianos realizando tareas educativas y sociocomunitarias en más de 130 países. A estos números hay que sumarle la presencia de las FMA en 93 países de todo el mundo. Si bien octubre es el Mes de las Misiones, que incluye el Domund o Domingo de las Misiones, fue en noviembre que se puso en marcha el sueño misionero salesiano. Las necesidades de los chicos y chicas no saben de fronteras ni límites geográficos. Por eso la ayuda y la acción por el otro tampoco pueden tenerlos. Los misioneros enseñan con obras qué significa moverse para dar una mano. E invitan a todos a ir con ellos, sea con el cuerpo, así como con la oración, alguna colaboración y la difusión de su mensaje de solidaridad.
