23 de Febrero de 2023

Comprometidos con el Pacto Educativo Global

Por los Jóvenes - Don Bosco adhirió al Pacto propuesto por el Papa Francisco y seguimos asumiendo ese compromiso.

"Es hora de mirar hacia adelante con valentía y esperanza. Que nos sostenga la convicción de que en la educación se encuentra la semilla de la esperanza: una esperanza de paz y de justicia. Una esperanza de belleza, de bondad; una esperanza de armonía social". Eso afirmaba el papa Francisco en el lanzamiento del Pacto Educativo Global.

Fue en el año 2020, momento de mayor impacto de la pandemia con graves consecuencias en la educación de niños, niñas y jóvenes. En ese momento desde Por los Jóvenes - Don Bosco adherimos al mismo y hoy seguimos honrando ese compromiso junto a las Casas Salesianas.

Trabajamos junto a ellas en vistas a contribuir desde Argentina a un cambio mundial desde la perspectiva educativa. Lo hacemos a través del apoyo y financiamiento de propuestas diversas, siempre en función de promover la formación de chicos y chicas, jóvenes y adultos de cara a su futuro.

Entre estas propuestas se encuentra por ejemplo Casa Oratorio Don Bosco, de Córdoba, donde muchos de quienes participan se han desvinculado de la escolaridad o mantienen un vínculo interrumpido. Con acciones como apoyo escolar y un trabajo coordinado con las escuelas de la zona, junto a Casa Oratorio buscamos que puedan sostener y avanzar en sus trayectorias escolares.

También es importante el rol de los centros de formación profesional, buscando que esa capacitación abra las puertas del mercado laboral para muchos jóvenes sin empleo. El Centro San José en Salta, la Escuela Nazaret en el barrio Ludueña de Rosario y un Centro de Formación Profesional en San Juan (en el que promovemos la formación en empleos verdes), son algunos espacios que este año estamos acompañando.

Durante aquel 2020 la pandemia provocó la inmediata suspensión de las clases presenciales en todo en el país y en todos los niveles del sistema educativo nacional: 10.5 millones de niños, niñas y jóvenes dejaron de asistir a la escuela. Además de truncar la continuidad de los procesos educativos, la no asistencia a los centros escolares impidió el acceso a la alimentación por medio de viandas diarias. El 70% de escuelas de gestión estatal proveían de alimentos diarios, y muchas de ellas no pudieron adecuarse al contexto de emergencia.

Este año aún se perciben las consecuencias de este proceso, con casi 244 millones de niños y jóvenes en el mundo que están sin escolarizar. En Argentina un gran desafío es el de mejorar las condiciones de aprendizaje y reforzar la permanencia y consistencia de los jóvenes en los espacios educativos.

Haciendo propio el mensaje de Francisco, en Por los Jóvenes - Don Bosco reavivamos “el compromiso por y con las jóvenes generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e incluyente, capaz de la escucha paciente, del diálogo constructivo y de la mutua comprensión”, conscientes de que “todo cambio requiere una trayectoria educativa”, siempre en pos de promover “un camino de vida” nacido de “una esperanza basada en la solidaridad”.

La educación de calidad va a permitir construir un mejor futuro para todos y todas, con oportunidades y posibilidades. El valor de la educación cobra vida en muchos jóvenes como Lyzandra y por eso no renunciamos a nuestro compromiso por educar adaptándonos a las circunstancias.