15 de Octubre de 2017

Para llegar a “dron”de sea

Un grupo de médicos y técnicos argentinos y dos estudiantes salesianos españoles usan la tecnología, en particular drones, para ayudar.

La tecnología avanza de manera vertiginosa y cada día hay nuevas posibilidades abiertas por ella. Una de las mejores formas de aprovecharla es buscando mejorar la vida de todos.

Dentro de los avances técnicos, los drones son de los que actualmente generan más atención y se están probando diversas formas de emplearlos.

En ese camino se inscriben un grupo de médicos y técnicos de Argentina tanto como dos estudiantes de un centro salesiano en España.

¿Un avión? ¿Un pájaro? ¿Superman? ¡Es un remedio!

Diego Pereyra, de 36 años, es un médico argentino especialista en medicina crítica y terapia intensiva. Además, es fundador y director de Medivac.

Pero por si fuera poco, Diego sintió que podía sacar más provecho de su conocimiento y su capacidad y creó el Proyecto Drone.

Con la ayuda de Fernando Lipovetsky, Mauro García Aurelia, Augusto Chesini, Nicolás Luzzi y Kevin Dagostino, médicos algunos, técnicos informáticos otros, diseñaron un dron para actuar en situaciones de emergencia.

Su intención es que en casos como accidentes en rutas, incendios, derrumbes, catástrofes naturales o en lugares con concurrencia masiva (como un concierto) se pueda utilizar este aparto tecnológico para hacer llegar elementos de salud a las personas en riesgo.

Un ejemplo concreto de esto se dio en una inundación en La Plata, cuando el acceso a una señora afectada resultaba imposible, pero con el cuadricóptero se le pudo alcanzar insulina y un glucómetro, ya que era insulinodependiente.

¿Cómo terminó? Después de 8 horas pudieron rescatarla, gracias a que había sobrevivido por los elementos que le alcanzaron a través del aire.

El dron también contaba con parlantes y un micrófono, de manera que los médicos, como Diego mismo, le podían indicar a la mujer cómo proceder.

Este grupo multidisciplinario ya cuenta con equipos de distintos tamaños (como Futura +, Futura X y Futura H) que permiten transportar diferentes materiales médicos en situaciones de riesgo (hasta equipos de resucitación).

Aprobada por la Sociedad Argentina de Medicina, esta herramienta permite reducir el tiempo de espera de las ambulancias y llegar a lugares de difícil acceso, sobre todo en casos de emergencia.

"Necesitamos a la tecnología para disminuir la desnutrición, la mortalidad infantil y la mortalidad por incidentes de tránsito y por muerte súbita, entre otras prioridades", reflexiona Diego.

Salvar vidas, la prioridad para dos alumnos catalanes

En Cataluña, España, dos estudiantes de un centro de formación profesional salesiano también entienden que los drones son una herramienta para beneficiar a otros.

En este caso el proyecto tiene como objetivo poder encontrar minas antipersona y restos de material de guerra para desactivarlas y así salvar vidas.

Ellos son Jesús Suriol y Daniel Llopart, estudiantes del Ciclo Formativo de Grado Superior de Mecánica de Salesians Sarrià.

Pero no se quedan ahí. Los drones desarrollados por los estudiantes también están pensados para transportar equipos sanitarios y materiales médicos en zonas de conflicto, algo similar a la utilidad que le dan los jóvenes argentinos en catástrofes.

El proyecto fue bautizado por los dos chicos como Dron500, por la distancia entre las hélices del aparato (500 milímetros).

Tuvo como inspiración un prototipo norteamericano pero cuenta con la gran ventaja de tener un costo muchísimo menor.

Además, el trabajo recibió un galardón en los Premios Nacionales Don Bosco, por lo que ya se convirtió de una idea en una realidad.