7 de Octubre de 2024
Cuando más se necesita, más estamos. Los misioneros salesianos de Zapala lo saben y lo hacen realidad con sus acciones.
$302.147. Ese monto es el que separa el ingreso de una familia promedio en Argentina ($407.171) del costo de la Canasta Básica Total ($709.318). Es decir, el que genera que 15,7 millones de personas estén bajo la línea de pobreza.
El dato fue presentado en la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC referente al primer semestre de 2024, en el cual se informa que 52,9% de las personas en Argentina viven en situación de pobreza y 18,1% en situación de indigencia.
Una realidad que afecta a la población en general y con especial impacto en los jóvenes de 15 a 29 años, entre los cuales el 60,7% es pobre.
Y una realidad que nos demanda actuar con premura, ya que tanto la indigencia como la pobreza registraron aumentos en relación al segundo semestre de 2023.
Si bien en el informe de INDEC se presenta a la Patagonia como la región con menor incidencia de la pobreza, es diferente la situación para quienes viven en parajes rurales con pocas prestaciones o migran a las ciudades en condiciones precarias.
Son precisamente esas familias, con especial atención a niños, niñas, adolescentes y jóvenes, las destinatarias principales de las acciones de los misioneros salesianos en regiones como la de Zapala, en Neuquén.
Allí las comunidades de misioneros salesianos y hermanas consagradas trabajan a la par con el fin de apoyar material, pastoral y educativamente a quienes se desplazan desde el campo a las ciudades (Zapala, Junín de los Andes y San Martín de los Andes), así como recorren grandes distancias para sostener proyectos que mejoren la vida diaria y a futuro en los recónditos parajes rurales del sur argentino (como Mallín de los Caballos, Aguada de Sala y Villa Puente Picún, entre otros más de 15 parajes).
La misión salesiana consiste en “estar y compartir la vida”, algo que se refleja en actividades concretas y también en lo cotidiano: un mate, una charla, estar en los momentos más importantes en la vida de las familias, ponerse a disposición ante cualquier emergencia.
Precisamente entre las distintas acciones que desarrollan las comunidades misioneras están las de apoyar a las familias, sobre todo a las más alejadas y carenciadas, con alimentos, ropa, calzado, leña y con todo tipo de ayuda.
También sostienen acciones de apoyo escolar -en articulación con Cáritas Parroquial- en la zona urbana y rural; catequesis, celebración de la Eucaristía, Fiestas Patronales en los parajes, entierros y aniversarios de fallecimientos; Oratorio festivo y actividades recreativas como fútbol; talleres de tejido artesanal.
Con propuestas más establecidas como los Talleres Don Bosco, y otras que van surgiendo orgánicamente según la iniciativa de cada comunidad, lo importante es estar, acompañar y brindar oportunidades para construir un futuro más próspero.
La obra salesiana en Zapala se enriquece de y contribuye a la misión salesiana que se inició hace 150 años en la Patagonia argentina.
El Espíritu Salesiano y el Sistema Preventivo de Don Bosco guiaron con criterio oratoriano a los primeros misioneros salesianos, entre ellos Cagliero, Milanesio, Gardín, Zandonella, Francisco Calendino… y hoy se refleja en el trabajo que realizan salesianos como P. Francisco y laicos como Gabriela y Agustín.
Estas acciones misioneras en la Patagonia se sostienen gracias al aporte solidario de quienes donan en Por los Jóvenes - Don Bosco. Te invitamos a sumarte como donante o hacer un aporte especial con un clic acá.
Fuentes consultadas:
INDEC: https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/eph_pobreza_09_241C2355AD3A.pdf